Ahora sí, estamos a nada de cerrar este 2022 y posiblemente te genere un poco de estrés pensar en toda la comida, eventos, posadas y más que se avecinan. Tienes miedo de perder el control y echar por la borda el trabajo que has estado haciendo durante algunos o varios meses. No entres en pánico y analicemos un poco.
Primero, es importante tomar descansos de los periodos en los que nos sometemos a una dieta, esto con el fin de poder mantenerte motivado durante todo el año y lograr un estilo de vida saludable y sustentable. No recomiendo iniciar una dieta durante la temporada de vacaciones por las siguientes razones:
La mayoría de las fiestas y reuniones se centran en la comida y la bebida. Es difícil realizar un seguimiento adecuado y las opciones de alimentos a menudo están fuera de nuestro control y son más densas en calorías (y muy deliciosas).
Muchas veces nos sentimos abrumados por todo el ajetreo de la temporada. Esta misma sobrecarga de cosas por hacer y pendientes hace que sea aún más difícil manejar la vida con un déficit de calorías. También somos más propensos a comer en exceso cuando nos sentimos estresados.
La falta de sueño derivado de todas las fiestas y eventos puede colocarnos en una posición más vulnerable a la hora de hacer elecciones sobre nuestros alimentos y por supuesto, dificultar nuestro plan de mantenernos en un déficit calórico.
Es una época del año ocupada con compras, niños, espectáculos navideños, visitas de familia, viajes fuera de casa, etc. Todas estas variables suelen hacer más difícil para algunos tener tiempo de hacer ejercicio, preparar comidas y realizar un seguimiento de los alimentos de manera constante.
Estar en un plan de déficit de calorías ya es, por naturaleza, algo difícil. La única manera de lograr resultados es siendo constante. No lo hagas más difícil de lo que es al tratar de hacerlo en medio de la temporada navideña. Ya habrá otro momento mejor, respira profundo.
Ahora, no estoy diciendo que este periodo sea un “atáscate ahora que hay lodo” y que no se debe tener ninguna consideración sobre nuestra alimentación. Pero creo que vale mucho la pena optar por un poco más de libertad y flexibilidad y estar en un plan de mantenimiento y no en un plan de pérdida de peso.
No olvides que no es necesario estar a dieta para progresar en nuestro cuerpo. Es posible hacer cambios permaneciendo en un plan de mantenimiento. También está bien simplemente mantener tu cuerpo y no tener ningún deseo de cambiarlo. Algunas veces la gente necesita ese permiso. No hay necesidad de cambiar siempre.
Entonces, para terminar y “envolver” este mensaje. Ésta debe ser una época donde podamos compartir momentos y hagamos memorias. Un momento donde podamos disfrutar de estar rodeados de nuestras familias y amigos, donde agradezcamos lo que tenemos y demos un buen cierre a este año. Esto suena mucho más transcendente que estar preocupados desde la mañana del 24 de diciembre por qué cosas si y qué cosas no vamos a comer. Que no se nos vayan los momentos relevantes de esta vida pensando en si es buena idea comer postre o repetir los romeritos.
Por último, algunos puntos que pueden ser de ayuda:
Olvida ya de una vez por todas la dinámica de darle rienda suelta a los excesos con la esperanza de un 2023 en donde: ¡ahora si voy a cambiar, éste va a ser mi año! Te aseguro que si vuelves a aplicar la misma fórmula el resultado será el mismo y para finales del 2023 estarás nuevamente en el punto de inicio (o más atrás).
No te saltes comidas. Di no a esas estrategias (anticuadas) de no desayunar y no comer, para poder darte un atracón en la cena. Desayuna y come como una persona normal: elige fuentes de proteína magras y vegetales como la base de tus platillos.
Mantente bien hidratado. Es común que, en esta época, debido al clima, nos den menos ganas de tomar agua. El agua no es negociable, tenemos que tomar agua en cantidades suficientes. Calcula unos 35 ml por cada kilogramo de peso para tener un estimado. Si no te es fácil tomar agua simple, opta por alguna infusión de té en caliente o agua mineral. Además, en estas fechas es probable que aumente tu consumo de alcohol y esta será una razón más para estar muy atento de tu consumo de agua.
Mantente activo. Si bien es posible que tu dinámica y horarios cambien, busca formas de incorporar movimiento en tu día. Salir a caminar por la mañana es un excelente recurso. Si eres de ir al gym, pero estás fuera de la ciudad busca la forma de hacer entrenamiento en casa. Ahora, si tienes la oportunidad de continuar entrenando de forma habitual, esas calorías extras serán una fuente de energía para entrenar mejor que nunca.
Descansa y relájate. Cuando el cuerpo se libera del estrés y realmente nos damos la oportunidad de descansar y disfrutar pasan muchas cosas maravillosas. Regálate eso este año, esa paz que tanto necesitas.
¡Feliz Navidad y fin de año!